martes, 18 de agosto de 2009

"Un último llamado a la unidad, antes de asumir solos el reto"

Hermanos bolivianos:

Este es el tercer y último llamado a la unidad que hacemos, en un postrer intento por converger todos los actores políticos en un acto de desprendimiento y responsabilidad para definir en interés de todos los bolivianos.

El pueblo ha optado por la unidad como instrumento para vencer al terror; para recuperar la democracia y el estado de derecho y para alcanzar finalmente desarrollo y seguridad.

Entonces, por lógica, la decisión sobre quién debe encabezar ese bloque de convergencia nacional que el país espera, es una decisión del pueblo y no de los políticos.

A esta altura ya no importa lo que pensemos los candidatos o lo que piensen los patrocinadores de los candidatos. Hoy importa saber qué es lo que piensa y quiere el país; son los bolivianos - ese 50% de bolivianos que aun no ha decidido a quién apoyar -, los que deben definir quién liderará este frente amplio de unidad.

Porque no se trata de cambiar “porque si”, sino de garantizarle al país que el cambio mejorará su forma de vida y eso sólo es posible si el cambio entraña capacidad y experiencia. Y la experiencia no se consigue mirando de palco la realidad, sino siendo parte de la política. La capacidad y el liderazgo se construyen con experiencia.

Por eso advertimos que propiciar el cambio de actores, y no asegurar que este implique modificar las viejas prácticas políticas, es reproducir el error histórico de pensar que cambiar de gobernantes es cambiar la manera de hacer política. Promover el cambio “porque sí”, sigue debilitando el sistema democrático, sigue debilitando la institucionalidad política.

Yo creo que el único cambio que no se ha dado aun y espera el país; el único cambio real es cambiar un gobierno ineficiente e irresponsable, por uno capaz y serio.

No se trata de cambiar de presidente, sino de cambiar la manera de administrar el estado; se trata de superar esa ineficiencia e incapacidad de los extremos de este país, por una opción de equilibrio, con capacidad de construir desarrollo con equidad y libertad, descentralizando el poder pero garantizando la unidad y la integridad nacional.

Yo creo en una autonomía como instrumento de desarrollo plural, como una alternativa de país y no simplemente como visión de región. La comprensión empequeñecida de la autonomía que postula que hay que feudalizar la política y los procesos electorales, es lo que evitó que en determinado momento CONALDE pudiera consolidarse como alternativa nacional.

Los análisis en ese sentido ya hicieron que las regiones se equivocaran una vez, creyendo que pequeñas victorias regionales podrían contrarrestar al poder nacional.

Quienes hemos sido parte de este proceso de ampliación de la democracia, ya sea desde institucionalidad descentralizada o desde el movimiento cívico, debemos confiar más en la experiencia que nos han dado los pasados tres años de gestión prefectural, que en criterios ajenos a la vivencia de hacer gestión pública.

Hoy reafirmamos nuestra convicción de obrar en interés del país, de deponer incluso nuestra candidatura y apoyar a otro candidato, si esa es la decisión del soberano.

Marcial, Adriana, Gerard y tantos otros bolivianos que se han sumado a este proyecto, esperaremos hasta el último momento a que el llamado de la racionalidad sea escuchado, antes de partir con lo que hemos logrado articular hasta ahora al encuentro de nuestro destino común.

Bolivia demanda desprendimiento, madurez y responsabilidad. La historia nos juzgará por nuestras decisiones, si hoy permitimos que el cálculo político - ese mismo cálculo que hirió de muerte el proceso autonómico -, nos arrebate la última oportunidad de salvar la democracia y restituir la República.

Manfred

jueves, 6 de agosto de 2009

Mensaje de Manfred a los bolivianos que residen en el exterior en el aniversario de la fundación de la República

Queridos hermanos bolivianos:

Bolivia es una República soberana e independiente. Ese es un legado invaluable de nuestros padres, que cada uno de nosotros ha adquirido el deber moral de defender aun con nuestras propias vidas.

Sin importar qué tan lejos nos encontremos de nuestra Patria, nuestra efemérides es la oportunidad de que cada boliviano reafirme este voto de convicción en la restauración de una Bolivia democrática.

A lo largo de sus 184 años de vida, la República de Bolivia ha sobrevivido a revoluciones y golpes de estado, a dictaduras militares y dictaduras sindicales, a infaustas guerras y a presiones diplomáticas internacionales que pretendían el desmembramiento territorial. La República sobrevivió al estado nacionalista de 1952 y sobrevivirá, sin duda alguna, también al estado plurinacional.

Sin embargo, la defensa del principio de la independencia de poderes, que es el principio y razón de ser de la República, ha demandado en cada momento de nuestra historia de la participación y compromiso de los bolivianos para con los principios básicos de la democracia: la alternabilidad, la seguridad jurídica, el control de constitucionalidad y los derechos humanos han demandado en cada situación de peligro de un pronunciamiento claro y contundente del pueblo.

Este 6 de agosto nos encuentra en la difícil tarea de reagrupar y alinear a las fuerzas de la democracia boliviana en un frente amplio que permita garantizar que el voto no se disperse, pero – más importante aun – que nos permita además volver a cautivar y volver a hacer creer a los bolivianos en un sistema político capaz de superar esos errores y excesos que en el pasado produjeron una crisis de descreimiento en las instituciones de representación política.

Y hemos avanzado, modesta pero esperanzadoramente, en la conformación de un frente amplio nacional. Pero además, hay un consenso en los diferentes actores políticos que se proponen a la Presidencia de la República sobre la necesidad de, en breve tiempo, integrarse a un único frente o al menos viabilizar la consolidación de quien mayor apoyo muestre en una consulta primaria.

Pero esta voluntad de desprendimiento de la clase política, debe tener su correlato en la vigilancia e involucramiento de la ciudadanía en el control del proceso electoral. No se juega una candidatura en las elecciones del 6 de diciembre, sino el destino de una República cuya subsistencia depende de que la democracia se imponga claramente al totalitarismo en las urnas.

Somos una República. No hay capricho ni decreto que vayan a cambiar ese sentimiento y esa voluntad de vivir en independencia de poderes, con control de constitucionalidad, con libertades civiles y bajo el abrigo de la seguridad jurídica.

Este diciembre, como nunca antes, nuestros compatriotas que dejaron Bolivia para aportar desde el exterior con su trabajo al sostén económico del país, tendrán también oportunidad de ser actores, de aportar con su voto y su actitud vigilante, a que podamos recuperar la democracia y la soberanía de Bolivia.

Este 184 aniversario de la fundación de Bolivia, ese debería ser el compromiso sentido y militante que haga cada boliviano: involucrarse activamente en defender la transparencia de los procesos electorales, sin importar la distancia que lo separe de nuestra Patria.

Manfred Reyes Villa Bacigalupi

Ciudadano de la República

Reyes Villa: Al ceder el Silala Evo “traiciona” a quienes lo encumbraron


ANF.- El Presidente Evo Morales traiciona las demandas populares que lo encumbraron en 2003 al retribuir el respaldo chileno a su gobierno con indulgencia en el diferendo por la soberanía sobre el Silala, según el candidato presidencial Manfred Reyes Villa. La declaración alude al virtual entendimiento entre Palacio Quemado y La Moneda para un arreglo en el que se reconoce a Bolivia propiedad sobre sólo el 50% de las aguas del manantial Silala y cuya refrenda promueve el Poder Ejecutivo. “El sostén político que le vienen dando algunos gobiernos vecinos al presidente Morales tendrá un costo muy caro en soberanía territorial y energética para Bolivia”, afirmó a su arribo a Sucre el candidato del frente amplio que también componen la cruceña disidente del MAS Adiana Gil y el dirigente indígena Marcial Fabricano. Reyes Villa recordó el papel del gobierno de Chile tras los enfrentamientos en Pando el 11 de septiembre y el fraudulento informe de UNASUR que la presidenta chilena Bachelet elevó a los organismos internacionales, en los que se falseó la verdad sobre los hechos en Porvenir para favorecer al gobierno de Evo Morales. Según el político, el gobierno nacional ha “correspondido” a ese respaldo político cediendo en la posición histórica boliviana que reivindica soberanía sobre una de las fuentes de agua dulce más importantes de la región, en territorio boliviano. “Evo Morales ha traicionado demandas populares sobre las cuales se encumbró y adquirió piso político en 2002, cuando el pueblo boliviano se pronunció por no tranzar la venta de gas a cambio de nuestra soberanía territorial en el Pacífico”, dijo. Reyes Villa recordó que su posición de oponerse a la venta de gas por Chile, promovida en 2002 por el gobierno de Jorge Quiroga, “le granjeó la enemistad de varias potencias extranjeras”, que según el ex prefecto se empeñaron en inviabilizar su candidatura pues la vieron como un obstáculo a la concreción del trato con Pacific LNG. “No nos hemos movido un milímetro de nuestra posición de entonces; la soberanía nacional no se puede tranzar a cambio del sostén foráneo”, agregó. También hizo votos porque la posición siempre ambivalente de la oposición congresal no vaya a ser cómplice de que se refrende ese preacuerdo en el Legislativo y encomió a la oposición congresal a actuar en representación de los intereses del país. “No es una cuestión de precio sino de soberanía; no depende de cuánto ofrezcan pagar, sino de que se restituya la deuda histórica por el uso de recursos no renovables cuya propiedad es de Bolivia, un hecho que el gobierno y el Congreso no tienen derecho a poner en entredicho a ningún precio”, afirmó. “Esa es la principal diferencia entre la república y el estado plurinacional; en una república hay independencia de poderes pero en un estado el presidente puede estar tentado a hacer su capricho”, explicó. JLZ/